domingo, julio 24, 2005
Ojalá durmiera siempre.

Si pudiera recordar lo que sueña no sería más feliz, como suele creer-pensar. Si pudiera recordar lo que sueña sería aún peor. Sería encontrarse y perferse, sería solo -ahí-, sólo -allá-. Romper aquel cristal, aquella maravilla que se siente, por más que no la pueda recordar, sería la agonía de concientizarse de que solamente fue eso, un sueño. |